Y de repente, llega alguien para hacerte entender por qué no había funcionado antes
La vida siempre nos sorprende, a veces con cosas que lamentamos, pero otras veces con cosas que no nos queda más que agradecer… Por fortuna o por desgracia no podemos ver a través de un agujero cómo estaremos en un futuro, no podemos asegurar que esteremos bien o mal, que nuestras decisiones nos llevarán por un camino u otro, ni si una persona estará o no en nuestro futuro.
Sin embargo, estando en algunos puntos de nuestro trayecto, ya con un buen trecho recorrido, podemos respondernos a muchos porqués que se nos presentaron a lo largo del camino… Porque sencillamente los puntos se unen hacia atrás, podemos armar el rompecabezas cuando ya tenemos todas las piezas para que logre encajar. De esta forma le damos sentido a muchas de las cosas que anteriormente no tuvieron explicación alguna.
Muchas veces no podemos entender cómo es que debemos decirle adiós a esa persona especial, cómo debemos retirarnos de ese sitio que amábamos, cómo es que cosas tan terribles como una enfermedad nos puedan afectar… Pero con el tiempo nos damos cuenta de que esas experiencias eran necesarias en nuestras vidas para ubicarnos en el sitio en el cual nos encontramos.
El amor no podemos excluirlo de este análisis, cuántas veces habremos llorado a alguien, nos habremos decepcionado, habremos jurado no volvernos a enamorar, para luego darnos cuenta de que el amor toca a nuestra vida, con unas ganas enormes de entrar y permanecer, que esa persona parece habernos estado buscando durante mucho tiempo y que sentimos descubrir algo en nosotros, que por más que hayamos amado o creído amar, sencillamente no habíamos sentido.
De esta forma entendemos que nuestras experiencias pasadas debían terminar, que todo ocurrió como si estuviese planeado a la perfección, para que nos encontráramos a esa persona que recorrería a nuestro lado, nuestro camino.
No te afanes si estás pasando por un duelo, si tu corazón está roto, no te empeñes en poner barreras para protegerte, el amor cuando llega lo hace cual tornado, arrasando cualquier obstáculo que le impida llegar a un corazón… Así que vive tu momento, pero no lo extiendas demasiado, pronto entenderás que sin ese duelo, lo que viene a ti no hubiese tenido cabida.
Y si ya has vivido lo que expreso en este mensaje, nadie más que tú para dar fe de que en algún momentos todo encaja perfectamente, que solo tenemos que abrirnos a la energía del amor y entender que con cada quien tenemos ciclos de evolución, de crecimiento y aprendizaje, que parecen prepararnos para esa persona que tiene la capacidad de reparar inclusive lo que ella no ha roto.
Por: Sara Espejo
Síguenos:
Doy fe, cuando llega el amor lo arrasa todo. He dejado constancia en mi último post. Lo he vivido, lo vivo. Quizá como dices esté todo planeado, pero no lo creo. Son casualidades o causalidades de la vida y en ese momento nadie está preparado para ello. Buen fin de semana.