Sé amable contigo, lo estás haciendo lo mejor que puedes
Sé amable contigo… Solemos ser tan crueles y exigentes con nosotros mismos, que muchas veces no nos damos cuenta de las heridas que nos estamos propinando. No los demás, nosotros somos capaces de hacernos más daño que cualquiera a nuestros alrededor.
Lo estamos haciendo lo mejor que podemos y cada decisión que hemos tomado hasta el momento ha sido perfecta. Quizás nos han llevado a lugares y a personas que consideramos inadecuadas, pero no es así. Cada paso representa lo que ocurre en nuestra mente y lo que estamos pudiendo captar de nuestra alma.
Todos tenemos unos recursos, recibimos información externa, vibramos de alguna manera y todo ello va tejiendo nuestras experiencias vitales. Cada paso que damos en un camino o en otro, no es casual, lleva consigo una historia, una aplicación de conocimientos, noches pensando en darlo o no o bien el riesgo que contiene toda improvisación. Pero nada es casual.
Debemos aprender a ser amables, a alentarnos, a darnos el ánimo que necesitamos. Nosotros tenemos que ser nuestro fan número 1 y éstas son solo algunas cosas que podemos hacer para potenciar la amabilidad que sentimos hacia nosotros mismos:
Confiar en nosotros:
Tenemos capacidades increíbles, solo nos limitamos a través de esos pensamientos y creencias saboteadoras, que nos hablan de miedos y de riesgos, de pérdidas y de fracasos. Pero debemos escuchar la vos de la esperanza, de la confianza, de la certeza, la que nos impulsa y nos lleva siempre a más.
Dejar de lado las comparaciones:
No importa lo que haga el otro, cada vida es un universo en sí misma. Lo que nos interesa es lo que hagamos nosotros y mientras menos elementos de comparación utilicemos, más tranquilos estaremos en el proceso.
Comenzar las veces que sea necesario:
Sí, a veces nos veremos en una posición en la que tendremos que convencernos de recomenzar y debemos inyectarnos el optimismo por todas las vías y asegurarnos de que al menos en nuestra mente todo saldrá bien. De cualquier forma, ése es el primer paso para crear.
Decirnos cosas amables:
Debemos hacer rutina el reconocernos, el decirnos cosas que nos agraden, lo capaces, lo brillantes, lo creativos, lo dedicados y tenaces que somos, buscando siempre la manera de hacernos sentir un poco mejor que segundos atrás.
No criticarnos:
Va de la mano con lo anterior. Podemos ser muy críticos, a veces injustamente y podemos decirnos cosas terribles que a fin de cuentas no mejorarán la situación y solo golpearán nuestra autoestima y perderemos un tanto la confianza en nosotros mismos.
Respetar nuestros ritmos:
Cada quien tiene un ritmo particular, podemos inspirarnos en alguien que haya alcanzado algo que queremos en un tiempo determinado, pero tomando la información que nos conviene, que por lo general es: “Es posible”. A partir de allí entender que hay mil caminos para llegar a Roma y nosotros tomaremos el que estemos preparados para recorrer o inclusive construir.
Procurar nuestro bienestar:
Este principio es súper amplio, pero intentaremos acotarlo, procurando resaltar el hecho de que si nos sentimos bien, nos va bien y también ocurre lo contrario. Todos podemos identificar a cada instante cómo nos sentimos a nivel emocional y aun cuando muchas veces no podemos hacer mucho por cambiar nuestro estado anímico, siempre habrá una manera de subir al menos un peldaño en esa escalera emocional y ello va muy ligado a la manera en la cual enfocamos las cosas y le damos forma a nuestros pensamientos.
No seas duro contigo, aprende a flexibilizarte, la vida te invita a ser feliz, no te compliques más de la cuenta y abre todos los canales para recibir lo que deseas y si crees, no habrá manera de que no llegue a ti. Estás dando lo mejor de ti, lo que quizás puedas mejorar es el trato contigo y aquí te dejamos algunas ideas, que esperamos que las pongas en práctica.
Por una vida más feliz para ti y para todos.
7 de febrero, 2020
Por: Sara Espejo – Reencontrate.guru
Publicado en: Reencontrate.guru